Es difícil seguir un presupuesto a la hora de divertirnos, lo más común es terminar excediéndonos en gastos. Ahora bien, piénsalo de esta forma, distribuye el dinero a lo largo del mes teniendo claro cuánto corresponde a necesidades fundamentales, cuanto debes ahorrar para cumplir tus metas y cuanto está disponible para divertirte. Esto te permitirá llegar a fin de mes sin el tradicional “descuadre”.
Cada mes tendrás algunas necesidades fundamentales, como la vivienda, comida y transporte, es decir, los gastos fijos. Siempre dale prioridad a estos gastos y ten claro cuánto suman al mes. Dependiendo de las metas que te programes, recuerda cuánto dinero debes ahorrar mensualmente. El resto del dinero debes distribuirlo o entre esos otros “gasticos”, como el último libro de tu autor favorito, el jueves cultural, el viernes de rumba o esa invitación a comer pendiente, todos estos son gastos variables.
Adicionalmente, cuida esos “gastos hormiga” que se te suelen presentar. Los “gastos hormiga” son esos pequeños consumos diarios que realizas casi inadvertidamente y que al final del día parecen que no afectan en nada tus finanzas, sin embargo, si realizas el ejercicio de sumar este consumo diario y lo trasladas a periodo de tiempo más largos, podrás identificar una masiva fuga de dinero que afecta tu capacidad de ahorrar para esas metas que te propusiste.
Hay muchas formas de ahorrar, cada una con sus ventajas y riesgos tales como el tradicional colchón, el coqueto marranito, o medios modernos, seguros y vigilados por las autoridades como las cuentas de ahorros tradicionales y simplificadas, los depósitos electrónicos y CDTs, entre otros, cada uno con costos y servicios específicos. Lo invitamos a consultar y comparar entre los distintos productos y servicios que te ofrece el Banco.
Fuente: Asobancaria