Desde hace varios años el mundo se mueve a un ritmo acelerado y los procesos que antes tomaban meses en salir a producción, ahora se llevan a cabo en cuestión de días o inclusive en horas, gracias a que las empresas han buscado formas de desarrollar softwares que solucionen las necesidades del cliente y que puedan reaccionar más fácilmente ante los cambios que puedan surgir en un proyecto.
Es posible que hayas leído o escuchado recientemente el término Agile, que se traduce como ágil en español, pues este marco de trabajo (conjunto de valores, principios y prácticas que constituyen la base sobre la que cada organización añade sus prácticas para implementarlo), es utilizado desde hace algún tiempo en los sectores empresariales y tecnológicos, ya que es un aliado importante para que las empresas logren la Transformación Digital.
Agile se caracteriza por el desarrollo de proyectos que requieren no solo de rapidez, sino también de flexibilidad para adaptarse a las condiciones del mercado a través de un trabajo colaborativo.
Sus orígenes se remontan al año de 2001 en la estación de esquí The Lodge at Snowbird en las montañas de Utah, donde los representantes de las principales empresas de software de esquí, se reunieron para tratar de encontrar las mejores prácticas que tenían en común. El resultado de este encuentro fue el Manifiesto de Desarrollo de Software de Agile.
¿Cómo funciona Agile en las empresas?
El agilismo tuvo sus inicios en los proyectos de desarrollo de software y sus principios han hecho tanto eco en el mundo que se pueden aplicar a cualquier tipo de proyecto, ya que tienen como primicia entregas tempranas que generen valor y realimentación constante para que los resultados estén centrados en el usuario. Adicionalmente, permite obtener resultados más favorables a través de equipos de alto rendimiento, en donde el cliente también es parte activa y se puede dar un feedback rápido sobre el proceso que se está llevando a cabo.
Las bases de estas metodologías eficaces, son:
- Priorizar los objetivos del cliente.
- Ser flexible ante los cambios.
- Conformación de equipos multidisciplinares, que son aquellos que trabajan juntos durante todo el proyecto y están organizados.
Otra de sus características son las entregas continuas: el proyecto se prioriza de acuerdo a las necesidades que más valor den al negocio, realizando entregas tempranas de valor para recibir un feedback temprano del cliente y así poder ir ajustando el producto a las necesidades que tenga el mercado.
Desde hace algunos años, el Banco de Occidente de Colombia ha estado dando sus primeros pasos en Agile y en la actualidad, este se está potencializando por medio del proceso de Transformación Digital, del que próximamente tendrás más noticias.
“Los principales beneficios en la implementación del agilismo es que nos ha permitido romper paradigmas, cambiar el modelo de pensamiento e introducir nuevas formas de hacer las cosas para una finalización rápida de los procesos; además, en la medida en que se ven los resultados, la motivación de los colaboradores involucrados crece y la organización ve que sí es posible alcanzar las metas en corto tiempo”, afirma Solanye Vargas, integrante de nuestro Laboratorio de Transformación Digital.
¿Y tu empresa ya incluye el agilismo en su forma de trabajo?